La empresa ilicitana Greene se ha sumado al proyecto europeo ‘Symsites’, que impulsa Aitex junto a 30 socios de nueve países diferentes. La iniciativa tiene el objetivo de desarrollar la cooperación entre diferentes organizaciones para el buen funcionamiento de la economía circular. Para ello, se han unido universidades, centros de investigación, empresas privadas, compañías de gestión de aguas residuales y asociaciones de gobiernos locales, procedentes de España, Dinamarca, Austria, Grecia, Alemania, Bélgica, Italia, Rumanía e Israel.
El proyecto ‘Symsites’ concluirá con la creación de cuatro demostradores piloto denominados EcoSites situados en cuatro países europeos en los que, a partir de distintos residuos, se generará agua limpia, energía, varios flujos secundarios de productos reciclados (lodos, biogás) y productos de alto valor añadido (moléculas plataforma, fertilizantes, PHAs), etc. para su reutilización. Los EcoSites tratarán residuos industriales de diferente origen y tipología. En España será cosmética y textil; en Dinamarca, cervecería y agricultura local; Austria, industria cárnica, y en Grecia, el aceite de oliva.
Greene va a participar aportando su conocimiento en el desarrollo continuo en las mejoras de los procesos termoquímicos para tratar distintas tipologías de residuos sólidos no reciclables (residuos de composición compleja) y generar nuevas corrientes (gas, líquidos y sólidos). El proceso de pirólisis que utiliza la empresa en sus plantas se optimizará para adaptarse a los residuos sólidos no reciclables de entrada y maximizar el rendimiento de moléculas valiosas, como el ácido benzoico. A su vez, se investigará en tecnologías para la separación y purificación de dichas moléculas a partir de mezclas o compuestos de rechazo en el proceso de pirólisis. En cuanto a los sólidos (chars), se adaptará el sistema de pirólisis para obtener el contenido de sólidos suficiente para los procesos posteriores.
Tal como explica el proyecto, los procesos y empresas dedicadas al reciclaje llevan ya tiempo implantadas en la sociedad. Sin embargo, en la mayoría de los casos los enfoques se encuentran circunscritos a un determinado ámbito de actuación. El ciudadano deposita los residuos en contenedores de recogida separada. La empresa municipal realiza el traslado al centro de tratamiento de residuos urbanos. Allí, se clasifica, y se destina hacia procesos de recuperación de materiales, incineración o depósito en vertederos. Los materiales recuperados son vendidos como materiales secundarios a empresas e industrias, que los utilizan para nuevos procesos de fabricación. En última instancia, nuevos productos que están compuestos por un porcentaje de materiales reciclados llegan a los ciudadanos a través de los canales de comercialización. Estos diferentes eslabones son los que conforman la cadena de la economía circular. Sin embargo, cada uno por separado es incapaz de cerrar los ciclos materiales, pues requiere de las funciones que cumplen el resto.
Por tanto, el proyecto Symsites (concedido dentro de la convocatoria europea: HORIZON-CL4-2021-TWIN-
La ejecución del proyecto se iniciaba el pasado 1 de junio y durante los días 5 y 6 de julio en Alicante, tuvo lugar la primera reunión a la acudían representantes de los 30 socios participantes, para dar por iniciado el proyecto cuyo periodo de ejecución se prolongará durante los próximos cuatro años